Robin Hood es un personaje del folclore inglés medieval, inspirado en una persona real, probablemente Ghino di Tacco, forajido italiano. Si bien, como todas las leyendas, su historia fue originalmente de transmisión oral, existen menciones escritas a Robin Hood desde 1377.
Según la leyenda, Robin Hood era un rebelde que defendía a los pobres y desafiaba el poder. Se escondía en el bosque de Sherwood, cerca de la ciudad de Nottingham y se caracterizaba por su destreza como arquero. Se lo conoce también como “el príncipe de los ladrones”, pues robaba a los ricos para darles a los pobres.
Hoy un todos lo diarios anuncian la siguiente noticia, “Telefónica España extiende a toda la plantilla la jornada laboral de cuatro días” https://bit.ly/3xqulyK En la misma se informa que Telefónica España ha cerrado este martes un acuerdo con los sindicatos mayoritarios para extender a toda la plantilla la jornada laboral de cuatro días a la semana, con la bajada de sueldo correspondiente, aunque con una bonificación por parte de la empresa de un 20%, informaron fuentes de la operadora.
A la medida se podrán acoger en principio de forma voluntaria, a la medida se pueden acoger los casi 18.000 empleados con los que cuenta la filial española de la multinacional de telecomunicaciones. La dirección de Telefónica ha decidido extender la propuesta tras los buenos resultados arrojados por la prueba piloto realizada desde el pasado 1 de octubre. A esta afirmación que hoy se anuncia en la prensa respecto al piloto, hay que confrontar con lo publicado por un diario el 30 de septiembre https://bit.ly/3O2nNMd, en la misma se informa que solo el 0,1% de la plantilla aceptó dicha propuesta ofertada. El diario decía, que se habían apuntado unos 150 trabajadores (de 15.000 que tiene la compañía) y que, a falta de cerrar los números definitivos, podría rondar como máximo los 175 empleados. En el diario se ponía el dedo en la llaga con respecto al motivo de dicho movimiento empresarial, los sindicatos mayoritarios UGT y CCOO (firmantes del acuerdo con la empresa) lo reciben con optimismo y esperanza, el sindicato AST (mayoritario en Madrid Y Barcelona donde se concentra la mayoría de la plantilla, recela del proyecto y asegura que se trata de una forma encubierta de reducir los costes salariales. Ese día menos de trabajo que no se realiza se descuenta de la nómina, aunque hay una compensación empresarial del 20% de la jornada. En cifras es la siguiente situación, se trabaja 32 hora en lugar de las 37.5 horas (los viernes no se trabajan) pero se cobra un 16% menos que antes. Según el portal Jobquire, la media de salarios es de un sueldo de 42.954 euros brutos al año, con la “semana laboral flexible bonificada” se pasaba a cobrar 6.440 euros menos, ósea que el sueldo disminuía a 36.500 euros al año https://bit.ly/3aC0iuX
Concluye la noticia del comienzo del post, informando que ahora se abre un plazo desde el 9 de junio al 15 de julio, para que los trabajadores que elijan acogerse al plan lo comuniquen a la empresa, ya que se trata de un plan voluntario. Para esos empleados, la jornada de cuatro días se hará efectiva a partir del 1 de septiembre y finalizará el 31 de diciembre 2022. No obstante, la intención de la empresa es prorrogar la fórmula de forma anual a partir de enero de 2023. La medida ya se incluyó en la prórroga del II Convenio de Empresas Vinculadas (CEV), acordada con los sindicatos en 2021, por lo que no será necesaria una modificación de este. Los empleados que ya participan en el programa piloto podrán continuar con la jornada recortada en julio y agosto si así lo desean. Por su parte, los sindicatos mayoritarios de Telefónica España –UGT y CC OO- se han mostrado satisfechos por la ampliación de la fórmula, aunque buscarán mejorar la bonificación que aplica ahora la empresa, es decir, que la reducción de salario sea menor para hacer más atractiva la jornada flexible. Se utiliza como argumento para defender dicha jornada las siguientes razones, beneficios para la salud mental, la conciliación familiar, así como la sostenibilidad al reducir el número de desplazamientos.
La noticia hay que situarla con respecto a lo sucedido desde la llegada del actual presidente del grupo Telefónica. Cuando llegó el 8 de abril del 2016, la plantilla de la filial española era de 31.118 empleados según lo publicado en el primer trimestre del año 2016. Ahora la noticia nos informa que la plantilla que se puede acoger a dicha propuesta es de unos 18.000 empleados, es decir, la pérdida de empleo desde su llegada a la presidencia ha sido de 13.118 empleos (-42,15%) menos de plantilla. Por lo tanto, la reducción de la masa salarial ha sido importantísima, pero esta pérdida ha sido acompasada con la perdida de accesos que la operadora ha sufrido en estos poco más de seis años al frente de la operadora, en total se han perdido 1.256.800 accesos. Menos accesos significan menos ingresos, y, por lo tanto, para mantener la rentabilidad es necesario realizar ajustes en los costes con el fin de que la rentabilidad no se vea afectada.
Esta propuesta de reducción de jornada choca frontalmente con un hecho incontestable como quedó de manifiesto con el piloto puesto en marcha, la plantilla no quiere reducción de jornada con la consiguiente merma de salario, la plantilla quiere más teletrabajo, en lugar de dos días que están actualmente estipulados siempre y cuando sea posible. Para él equipo directivo y los sindicatos mayoritarios, las razones para apoyar dicha propuesta de cuatro días laborables son diferentes. Para los directivos, es un eslabón más en cuanto a la reducción de costes ante un escenario de pérdida constante de accesos como nos informa, mes a mes, la Comisión Nacional del Mercado y la Competencia (CNMC). Para los sindicatos mayoritarios, es una forma de no perder la poca relación que tienen con sus cada vez más exiguos afiliados, ya que teletrabajando la dispersión juega en su contra al carecer de vínculo y conexión con él trabajador. La digitalización es un hándicap para algunos sindicatos, que han perdido pie con la realidad que vivimos al carecer de credibilidad, ya que todo lo que firman lo hacen sin consultar a los trabajadores. Es decir, funcionan a hechos consumados como esta ultima firma.
El 29 de octubre escribí un post en el blog en el que describía los problemas que tienen dichas organizaciones sindicales (UGT y CCOO) https://bit.ly/3vTJvKk, la caída de afiliación, la falta de credibilidad, la falta de recursos económicos a través de la afiliación hace que sean rehenes de las subvenciones políticas y del mundo empresarial, etc., todo ello les ha llevado a un escenario sin salida que probablemente en las próximas elecciones sindicales se vean arrinconadas por sindicatos mal llamados minoritarios. Estos, en provincias donde se concentra mayoritariamente la plantilla de Telefónica de España como es Madrid y Barcelona, reinan en dichas plazas.
En un escenario como el actual, donde la inflación esta impactando gravemente en las economías domésticas, pensar en reducir ingresos del salario es ilusorio. Por el contrario, existen otros países que están probando dicha reducción de jornada sin reducción de salario, como por ejemplo Reino Unido, https://bit.ly/3zsw9sq o Islandia, donde el experimento, realizado de 2015 a 2019, a los trabajadores se les pagó lo mismo por trabajar menos horas. Y la productividad se mantuvo o mejoró en la mayor parte de los lugares de trabajo, indicaron los investigadores https://bbc.in/3mvFl7K En Islandia no existe un Robin Hood, pero el índice de afiliación es del 90%... Quizás sería un buen espejo para que se miren algunos sindicatos españoles, que no encuentran la brújula par ir hacia el norte.
Ya lo dijo Nicolás Redondo Urbieta: “El espíritu combativo ha desaparecido; en los últimos años ha habido una moratoria sindical”.
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