Modelo Innovador de Gestión: RANKING MUNDIAL DE COMPAÑIAS EN I+D SEGÚN LA UE EN 2016

España sigue siendo un páramo con respecto a los principales países del mundo en cuanto a gasto en I+D. Los datos del último informe de COTEC http://bit.ly/1KV6kxH demuestran que desde el año 2010 el recorte del gasto en innovación ha sido del 50% y no del 30% como había sido anunciado por el gobierno. Esta circunstancia es debida a que a la reducción de las cantidades consignadas en los Presupuestos Generales del Estado se han unido unos decrecientes niveles de ejecución presupuestaria, que en 2016 han llegado a su nivel mínimo histórico. España avanza en sentido contrario que sus vecinos europeos, mientras el conjunto de la UE invierte hoy un 25% más en I+D que antes del inicio de la crisis económica, nuestra economía invierte un 10% menos. España es, según COTEC una excepción en Europa y forma parte del grupo de los cuatro únicos países que todavía no han recuperado los niveles de inversión de 2008. Por el lado empresarial, COTEC resalta que las compañías viven el mismo fenómeno que la administración. En el año 2015, las compañías españolas ejecutaron el 52,5% del gasto total en I+D. Es uno de los menores porcentajes de participación empresarial en Europa, cuyo promedio en 2015 era del 63,3%. Además, casi la mitad del gasto empresarial español en I+D fue ejecutado por pymes, mientras que en países como Francia, Italia o el Reino Unido solo ejecutaron alrededor del 20%, y en Alemania, menos del 10%.

Para COTEC son varios los problemas que aquejan al sistema innovador español, el primero es la educación. En España la práctica totalidad de los alumnos recibe al menos 13 años de escolarización, desde los 3 a los 16 años de edad, sin embargo la proporción de población con niveles educativos intermedios es muy reducida si se compara con otros países. Mientras en los 28 países de la Unión Europea más del 45 % de la población entre 25 y 34 años ha completado la educación secundaria obligatoria, en España dicha cifra era solamente del 24,5 %. Otro problema que se detecta es que existe una tasa muy baja de investigadores por cada mil ocupados en España es de 6,8, inferior al 7,9 de la media europea. Como sucede con el esfuerzo en I+D, también se está alejando de este promedio en los últimos años. Este parámetro se agrava al menor peso de los investigadores en las empresas, 2,4 por cada mil ocupados, frente a 3,8 del promedio europeo. En cambio, el peso de los investigadores en las administraciones públicas en España, 1,1 por cada mil ocupados, es superior al promedio de la UE-28 (0,9). En la enseñanza superior, España, con 3,1, está por encima de países como Alemania (2,4), Francia (2,7) o Italia (2,0), este dato debería hacer reflexionar a políticos y empresarios, ya que la tasa de universitarios que prefiere trabajar en el extranjero según una encuesta realizada por el Instituto Químico de Sarriá (IOS), alcanza el 53,4% de los universitarios españoles.

Desde el comienzo de la crisis el número de emigrantes con estudios universitarios ha ido creciendo paulatinamente, en el año 2008 se fueron de nuestro país 33.500; en 2009, de 36.000; en 2010, la cifra ascendió a 40.200; en 2011, a 55.500; y un año más tarde el número creció hasta los 59.700. Antes del estallido de la crisis en 2008, los licenciados que estaban relacionados con la investigación, la medicina y la biología eran los más solicitados en el extranjero. Actualmente, en esta lista se han añadido ingenieros, informáticos y arquitectos. Estos últimos se encuentran entre las profesiones que más sufrieron el desempleo desde que comenzó la crisis en España. Según los datos de la Unesco publicados en el año 2016, en el mundo entero sólo seis países han logrado superar el objetivo del 3% y tres de ellos son economías pequeñas de la UE: Dinamarca, Finlandia y Suecia. Este grupo figura por detrás de Japón, que alcanza el 3,6% y de Israel, que llega a la impresionante marca del 4,1%. Y por delante de todos, se encuentra el líder mundial, la República de Corea, que registra un 4,3%. Austria, Alemania y Suiza bordean el 3%, al igual que Estados Unidos, que es el país que más gasta en términos absolutos. El gasto de España sobre PIB fue del 1,22% según COTEC en 2016. Así pues, la situación actual es para hacérselo mirar a políticos y empresarios de este país, ya que el destino de los recursos que se están destinando a formar a las personas, no está teniendo un retorno que garantice el crecimiento futuro de las próximas generaciones, si se sigue con esta dinámica de fuga de cerebros.

RANKING MUNDIAL DE LAS 100 COMPAÑÍAS QUE MÁS INVIERTEN