Cualquier
compañía que compita en un mercado tiene que tener unos principios de actuación
que regulen el comportamiento de sus trabajadores y directivos con los distintos grupos de
interés con los que se relaciona, llámense; clientes, competidores,
accionistas, etc.
La
Responsabilidad Social Empresarial moderna fija las bases del concepto en la década
de 1950-1960, a partir de los planteamientos de Howard R. Bowen en 1953 publicados en su libro "Social responsibilities of the
businessman". La teoría se sustenta en la siguiente idea, las
empresas usan recursos que posee la sociedad, por lo que su uso genera un deber
ético de retorno hacia la sociedad de parte de ese beneficio que obtiene por la
utilización de dichos recursos. Existen diez principios básicos que
fueron aceptados por Naciones Unidas en el foro de Davos en 1999, que son
considerados de carácter universal y de aplicación a todas las organizaciones
empresariales.
. PACTO GLOBAL. Discurso plenario. Foro Económico Mundial. Davos Suiza. Enero, 1999. Naciones Unidas.
Hasta aquí
se pude decir que esto es la teoría, pero si lo llevamos a la práctica de las
compañías, algunas cuestiones que incluirían dichos principios
universales pueden ser los siguientes:
- Ser honestos en la realización de los programas que signifiquen una mejora de las condiciones de vida de las personas dentro de las compañías, llámese clima laboral u otros, aun cuando exista dificultad para llevarlos a cabo, esconder el problema no es una opción.
- Escuchar a todas las personas de la organización, no llegar a acuerdos con minorías en contra del sentir mayoritario, esto desmotiva y desincentiva el compromiso de las personas.
- Ser didácticos en la explicación del destino y objetivos de la compañía, fomentar el compromiso en base al conocimiento y participación de las personas en el destino de la misma.
- Fomentar desarrollo del personal, la formación y adquisición del conocimiento no es una opción, es una obligación que garantiza la sostenibilidad de la compañía, no es bueno ni desarrolla las capacidades de la compañía el hecho de que haya personas que en el año no reciban ningún tipo de formación.
- La compañía tiene que tener un código deontológico con sus suministradores o proveedores de servicios, las relaciones deben ser claras, transparentes y justas. Se debe velar así mismo por un escrupuloso complimiento de los estándares de calidad de dichos servicios, ya que aunque los realice una compañía interpuesta el responsable final del servicio es la compañía que subcontrata.
- Formar a las personas en los principios éticos de actuación, todo no vale con tal de conseguir una meta, los objetivos deben de ser alcanzables, el papel lo aguanta todo pero frustra a las personas cuando dichos objetivos están fuera de la realidad. Lo colectivo está por encima de lo individual.
- Contribuir eficazmente a la eliminación de la pobreza.
- Conservar el medioambiente mediante la reducción en los niveles de contaminación.
- Proveer un empleo digno allí donde la compañía realiza sus actividades. Contribuir a la reducción de la pobreza favoreciendo programas de educación y bienestar social.
Ya lo dijo Lü Buwei primer ministro chino del
emperador Ying Zheng: "Los
primeros reyes fueron los mejores emitiendo juicios, porque hacían de los
principios morales el punto de partida para todas sus empresas y la base de
todo lo que era beneficioso. Sin embargo, este principio es algo que las
personas de inteligencia media nunca respetan. Al no respetarlo, carecen de conciencia,
y al carecer de conciencia, persiguen el beneficio. Pero, mientras persiguen el
beneficio, les es absolutamente imposible tener la certeza de alcanzarlo".
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