En una pequeña aldea vivía un mendigo muy conocido por todos sus habitantes, por sus asombrosa capacidad para dar consejos y ayudar a las personas. El mendigo, sólo pedía la voluntad por ofrecer sus sabias palabras a los habitantes del pueblo. Tal llegó a ser su fama que el Rey, sorprendido por lo que le contaban, decidió visitarlo y pedirle consejo. Tras visitarle, el Rey quedó muy satisfecho con los consejos del mendigo y le pidió que le acompañase al palacio para que pudiese ayudarle en las tareas del día a día. El mendigo accedió y se marchó a vivir a un suntuoso palacio.
Cada día que pasaba, el Rey se mostraba más satisfecho con la ayuda del mendigo hasta que decidió prescindir de todos sus consejeros.
Uno de estos consejeros, resentido por la decisión del Rey, decidió espiar al mendigo para descubrir de dónde venía su capacidad para aconsejar tan sabiamente. Para su sorpresa descubrió que el mendigo abandonaba el palacio al atardecer y volvía a él antes de que amaneciese.
Un buen día decidió seguirle para ver qué hacía durante esas horas que se ausentaba del palacio. Sorprendido vio como el mendigo se dirigía al anochecer a una cabaña que se encontraba a las afueras del palacio. Ahí, el mendigo se despojaba de sus ricos ropajes y se volvía a poner sus antiguos harapos. Luego se acostaba en el suelo sobre un lecho de paja. Por la mañana, el mendigo se volvía a poner sus ricas vestimentas y volvía a palacio.
El consejero se dirigió al mendigo y le preguntó :
- “Mendigo, cuál es el motivo por el que te despojas de tus ropas para volver a ponerte tus harapos y duermes sobre el duro suelo pudiendo dormir sobre un lecho cómodo en el palacio”.
-“Muy sencillo”, le contestó el mendigo. “Para no olvidarme nunca del lugar de donde vengo”.
Quien se olvida del lugar de donde viene, olvida parte de su esencia como persona.
Hoy la prensa recoge la siguiente noticia, “¿A dónde irán los 140.000 millones para España del fondo de recuperación europeo? Renovables, eficiencia energética y despliegue de banda ancha” https://bit.ly/3kv11xP Según recoge la noticia, las prioridades de la Comisión Europea pasan por invertir en tecnologías limpias, transporte sostenible, digitalización de los servicios públicos y la adaptación de los sistemas educativos, entre otras. Bruselas calcula que los fondos comenzarán a llegar en la "primera mitad de 2021. Bruselas establece que los fondos de recuperación que gestionan los Estados miembros directamente a través de programas de reformas financiables a través del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia –672.500 millones de euros de los 750.000 millones del total de dicho fondo; la diferencia, 77.500 millones de euros, irán en programas de la Comisión Europea dentro del presupuesto plurianual– deben centrarse en impulsar las transiciones digitales y verde y estar alineados con el Semestre Europeo –el sistema de gobernanza económica comunitario, que marca recomendaciones por país–, que en su último informe pedía a España mejorar sus sistemas sanitarios. La Comisión Europea pide proyectos dentro de las siguientes áreas: anticipación de tecnologías limpias preparadas para el futuro y aceleración del desarrollo y uso de energías renovables; mejora de la eficiencia energética de edificios públicos y privados; promoción de tecnologías limpias preparadas para el futuro para acelerar el uso del transporte sostenible, accesible e inteligente, estaciones de carga y repostaje y la extensión del transporte público; despliegue de servicios de banda ancha en todas las regiones y hogares, incluidas las redes de fibra y 5G; digitalización de la administración y los servicios públicos, incluidos los sistemas judicial y sanitario; la nube digital europea de datos industriales y el desarrollo de procesadores más potentes, de vanguardia y sostenibles; adaptación de los sistemas educativos para apoyar las habilidades digitales y la formación educativa y profesional para todas las edades.
La Comisión Europea ha comunicado a los Estados miembros que, "pueden presentar formalmente sus planes desde el momento en que el mecanismo entre en vigor legalmente", que se espera para el 1 de enero de 2021, cuando se acaben las negociaciones del presupuesto plurianual (MFF 2021-2027), los trámites en el Parlamento Europeo, los parlamentos nacionales –para aumentar el techo de gasto– y la Comisión Europea comience a emitir la deuda para financiar el fondo. En cualquier caso, Bruselas establece la fecha límite para la presentación de los planes en el 30 de abril de 2021. Sin embargo, "la Comisión Europea anima a los Estados miembros a presentar sus anteproyectos de planes a partir del 15 de octubre de 2020. Los Estados miembros pueden ultimar sus planes tras la presentación inicial de los borradores. Los Comisarios económicos del Ejecutivo de la Unión se reunieron hace diez días con la Vicepresidenta del Gobierno, Nadia Calviño, a Bruselas hace diez días, "La Comisión ya está disponible a todos los niveles para colaborar con los Estados miembros en la preparación de sus planes", afirman en Bruselas. Todos los proyectos que se presenten tienen que contribuir eficazmente a la transición verde y digital, reforzando el potencial de crecimiento, la creación de empleo y la resiliencia económica y social del Estado miembro. La evaluación de los planes y proyectos por parte del Ejecutivo comunitario deben enviarse al Consejo –los gobiernos de los 27– mediante una decisión de ejecución a propuesta de la Comisión para su ratificación. El mecanismo de asignación, tendrá en cuenta, “hitos, jalones y metas claras, realistas, bien definidos, verificables y directamente determinados o influenciados por las políticas públicas”. Una vez cumplidos los mismos y los objetivos indicados en un plan de recuperación y resiliencia, "el Estado miembro presentará una solicitud a la Comisión para el desembolso de la ayuda financiera. La Comisión preparará una evaluación y solicitará el dictamen del Comité Económico y Financiero (órgano formado por el Consejo de la Unión Europea y la Comisión Europea) sobre el cumplimiento satisfactorio de los hitos y objetivos pertinentes". Si existiera desvíos en el desarrollo de dichos proyectos, cualquier Estado miembro podrá solicitar que el presidente del Consejo Europeo someta el asunto al siguiente Consejo Europeo. Si el Estado miembro no ha cumplido satisfactoriamente los hitos y objetivos, la Comisión suspenderá total o parcialmente la contribución financiera a ese Estado miembro.
Una de las cuestiones importantes que se desprende de la noticia y que no tiene que extrañar a nadie, es que el Gobierno español va a ir a Bruselas con un proyecto de digitalización para modernizar la economía española. Sin embargo, lo importante y relevante es que no cuenta con los responsables de la mayor compañía del país, Telefónica. Si la colaboración fuera estrecha entre ambos actores, Gobierno y Telefónica, ambos harían una presentación pública de los proyectos, objetivos y recursos que se presentarían a Bruselas con el fin de salir de la crisis económica. El Plan España Digital 2025 https://bit.ly/32McHq7 , fue el proyecto que el Gobierno español lanzó el 25 de julio con el que digitalizar nuestro país, dotado con 140.000 millones de euros. https://bit.ly/33H0bax Ante dicha situación, hay que decir que todos los planes que presenten los directivos actuales de la operadora en el futuro inmediato, son castillos en el aire, si tenemos en cuenta que el Estado a través de la fusión Bankia-La Caixa, será participe del accionariado de Telefónica, y como tal proyectará la forma en que la operadora sea la piedra angular de dicha digitalización. Como conclusión, se puede decir que la digitalización será uno de los proyectos estrella, sin embargo, no será llevada a efecto con el equipo directivo actual de la operadora.
Otro de los sectores estratégicos que tendrá un papel importante será el de las energías limpias con el fin de garantizar la sostenibilidad del planeta. En España tenemos una de las mayores eléctricas del mundo, Iberdrola. El Gobierno de España ya cuenta con una hoja de ruta para la reconstrucción, que incluye el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima, el proyecto de ley de Cambio Climático y Transición Energética, el paquete normativo de economía circular y el real decreto aprobado para ayudar al despliegue de las energías renovables. España cuenta ya con un mapa que ha dado trasladado a Bruselas, es el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC). El contexto de reconstrucción económica exige identificar las líneas con mayor efecto tractor sobre el empleo y la economía y potenciarlas: con inversión pública y activando las palancas normativas que estimulen la inversión privada. Además del impulso a las renovables, en España se propone priorizar la movilidad sostenible, que reforzará la cadena de valor ya existente (bienes de equipo, infraestructura de recarga y componentes y vehículos eléctricos), mejorará la calidad del aire y generará ciudades más habitables, y la rehabilitación energética, en particular para viviendas, sector especialmente intensivo en empleo y que genera sinergias positivas: con la lucha contra la pobreza energética y con la digitalización en la gestión de los edificios. Un ejemplo de ello es el tren eléctrico por pila de hidrogeno https://bit.ly/3hFeLUI Por lo tanto, los proyectos deberían incidir en estas líneas maestras, con lo que llama la atención la ausencia de ningún proyecto por parte de la eléctrica española en unión con el Gobierno https://bit.ly/32CAEzL Los fondos europeos, están pensados para dar un empujón a la demanda agregada, pero las altas tasas de desempleo en España obligan a priorizar los proyectos que tengan capacidad de generar empleo. Para ello, el fondo de reconstrucción prioriza las inversiones verdes, además del desarrollo de energías renovables, el país podrá aprovechar esta puerta para aumentar la eficiencia energética de los edificios impulsando un ambicioso plan de reforma del parque de vivienda. Esta es una manera de utilizar el fondo y generar empleo en un sector, como es el de la construcción, donde existen dificultades desde antes de la crisis del Covid-19.
El sector bancario, en el que están por ejemplo los bancos BBVA y Banco de Santander, está inmerso en un proceso de digitalización acelerado. Márgenes estrechos y tipos de interés al 0% más la entrada en el sector próximamente de los gigantes de Internet, han forzado a que el sector se haya tenido que reconvertir de forma acelerada. Un ejemplo de esta digitalización es Bizum, perteneciente a los bancos, que ya supera los 10 millones de usuarios. Las "fintech" o startups tecnológicas que desarrollan productos financieros están creando servicios y productos más innovadores y cercanos al consumidor y la banca las está incorporando y convirtiendo en palanca de impulso tecnológico, añaden. Entre los nuevos productos de dicha digitalización están, el estudio cita el "on-boarding" digital, que facilitará el alta de cuentas o de productos bancarios de manera cien por cien digital, la "tokenización", que sustituye por seguridad algún elemento dentro de los datos confidenciales de un cliente por un equivalente no sensible (el "token") o la verificación biométrica. Para estos desarrollos digitales en el sector bancario, se necesitan fondos que desarrollen el camino de dicha digitalización, sin embargo, al igual que en los dos ejemplos como son Telefónica e Iberdrola, no se conocen proyectos explícitos que busquen el desarrollo de dicho sector bancario.
Para terminar el post, decir que quizás lo que algunos presidentes del IBEX-35 olvidan es la hoja de servicios que traen bajo el brazo, unos con debacles bursátiles en la cotización bursátil y otros con serios problemas judiciales. Lo que es cierto, es que el interlocutor con la Unión Europea que negocia, acuerda y aplica dichos planes es el Gobierno de la nación… Cuestión esta, que deja en el más absoluto desamparo a dicha clase empresarial.
Ya lo dijo Mario Benedetti: “Usted aprende y usa lo aprendido para volverse lentamente sabio para saber que al fin el mundo es esto en su mejor momento una nostalgia en su peor momento un desamparo y siempre un lío... Entonces usted muere”.
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