En 1987, Mijaíl Gorbachov
(1931), comentando durante una entrevista las principales diferencias políticas
entre los sistemas políticos estadounidense y soviético, declaró a un
periodista:
- Si cualquier ciudadano norteamericano es libre para presentarse ante Reagan y ponerle a parir, nosotros no seremos menos. A partir de ahora, cualquier ciudadano ruso es libre de presentarse ante mí y poner a parir... a Reagan.
Hace unos días, una de las
compañías más grandes del mundo en el sector de las telecomunicaciones anunció
el relevo de su CEO (presidente), el cual dirigió la misma durante algo más de los últimos
13 años, Randall Stephenson. El mismo será relevado por un hombre de la
casa, el director de operaciones, John Stankey, quien asumirá el cargo el 1 de
julio. Durante la presidencia de Stephenson se realizaron adquisiciones
como por ejemplo; CNN Time Warner y Direct TV. AT&T comunico el viernes
pasado que Stephenson seguirá siendo el presidente ejecutivo de la
compañía hasta el 1 enero del año 2021 "para garantizar una transición de
liderazgo sin problemas". Stankey se unirá a la junta o
directorio el 1 de junio, pero no será el próximo presidente de la
compañía. AT&T dijo que nombrará un presidente independiente después de que
Stephenson deje su cargo el próximo año, y este es el matiz importante que esconde la batalla que se ha librado
dentro de la compañía hasta el relevo de su CEO. Stankey, de 57 años, que comenzó su carrera en Pacific Bell, una de las filiales en las que se segregó la antigua AT&T, fue CEO de Warner Media y posteriormente
fue nombrado en el mes de octubre del año pasado director de operaciones. Este
nombramiento, ya daba a entender que él ocupaba la primera posición para
suceder al CEO actual. En los últimos cinco meses, AT&T ha
llevado a cabo un proceso de búsqueda de ejecutivos dirigido por la miembro de
la junta, Beth Mooney, quien preside el comité de recursos humanos de la misma.
La compañía contrató al cazatalentos
Jeff Sanders, vicepresidente y socio gerente en la práctica del CEO de
¡Heidrick & Struggles, para encontrar candidatos
adecuados para reemplazar a Stephenson, afirmaron las personas familiarizadas
con el asunto. Se hizo un grupo finalista de varios ejecutivos de
telecomunicaciones, un CEO de una gran compañía de medios y un ejecutivo externo
con experiencia operativa. "El proceso del comité de recursos humanos fue
sólido y consideró candidatos internos y externos", dijo un portavoz de
AT&T, quien se negó a detallar los candidatos o consultores utilizados
en el proceso. "El comité de recursos humanos y los consultores que
contrataron formalmente fueron los únicos involucrados en el proceso de
búsqueda". Ninguno de los candidatos entendió la totalidad del negocio
de AT&T tan bien como Stankey, según personas familiarizadas con el proceso y la forma de pensar del fondo Elliott. AT&T posee un gran negocio de
telecomunicaciones, con tecnología inalámbrica y por cable, y un conglomerado de
medios en expansión, que incluye HBO, CNN, Turner, DirecTV, Warner Bros.
Entertainment, redes deportivas regionales y otros activos. Después de
entrevistar a los candidatos, Elliott vino a apoyar a Stankey
como el nuevo CEO, porque
contratar a alguien sin el conocimiento suficiente de AT&T,
especialmente durante una pandemia, podría tener consecuencias desastrosas. Sin
embargo, este relevo de guante blanco esconde una batalla soterrada que se inició
en la compañía cuando el fondo especulativo Elliot entro en
accionariado de AT&T a principios de septiembre del 2019 https://bit.ly/2y3y7lJ. En su
desembarco, 3.200 millones de dólares de inversión,
ya dejó claro cuál era su intención al actual equipo directivo, el
fondo explicó que había realizado esta inversión porque
AT&T muestra una "combinación única" de bajo rendimiento
"histórico", valoración "deprimida", activos "bien
posicionados" y un camino "claro" para generar valor a los
accionistas. El fondo de inversión ha ideado un "plan" que podría
llevar la cotización de las acciones de AT&T a superar los 60 dólares, lo
que implica un alza de cercana al 65% en comparación con la fecha cuando
adquirió dichos activos. Como consecuencia de ello, el equipo
directivo de AT&T, el 28 de octubre del 2019 presentó un plan de
desinversiones por valor de entre 5.000
y 10.000 millones de dólares (4.506 y 9.012 millones de euros) en
activos no estratégicos en el marco de un programa a tres años para elevar la
rentabilidad de la compañía, después de que en el tercer trimestre del año 2019 registrase una
caída del 21,6% de su beneficio neto, hasta 3.700 millones de dólares (3.335
millones de euros). http://bit.ly/36FuwGo
A esta situación hay que
añadir un detalle no menor, el administrador de dicho fondo Elliot, es Paul Singer, republicano
y cercano al movimiento conservador "Tea Party", el
cual donó a la campaña electoral del partido republicano 240.000 dólares.
Dicha persona mantiene una buena relación con el actual inquilino de la Casa
Blanca. Hace poco más de un mes, dicho fondo entró en el accionariado de Twitter
y nombro a cuatro consejeros, el fin último es el control de dicha red social
con el objetivo de ocupar el cargo de su actual director general, Jack Dorsey,
según avanzó Bloomberg. La red social es uno de los medios
fundamentales que utiliza el actual inquilino de la Casa Blanca, con el control
de dicha red social cierra un flanco por donde le pueden llegar multitud de críticas
a seis meses de las elecciones presidenciales https://bit.ly/2VXQ8Kc
Otro de los flancos que tenía
abierto el actual inquilino de la Casa Blanca estaba en el conglomerado de
AT&T, era la cadena de televisión CNN. Prueba de ello, es que una vez
anunciado el relevo de su actual CEO de AT&T, Donald Trump puso el siguiente tuit
en Twitter:
¡Una gran noticia! Randall
Stephenson, el CEO de AT&T muy endeudado, que posee y preside Fake News
@CNN, se va o fue forzado a abandonar. Cualquiera que permita que una
"red" de basura haga y diga las cosas que hace CNN, debe irse CUANTO
ANTES. ¡Esperemos que el reemplazo sea mucho mejor!
- Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 24 de
abril de 2020
Por otro lado, AT&T
no está siendo inmune a la crisis económica que se ha desatado por el COVID-19, en concreto en los resultados
del primer trimestre el año 2020 ha perdido en su servicio de TV premiun
897.000 abonados, mientras que en la plataforma de streaming AT&T TV vio
caer la cifra de suscriptores en 138.000 suscriptores. La cifra de negocio
entre enero y marzo alcanzó los 42.779 millones de dólares, un (-4,6%) que en
el primer trimestre del año 2019. Con
una caída del 4,4% en la facturación por servicios, hasta los 38.883 millones
de dólares, y una caída del 6% en el negocio de equipos, hasta los 3.896
millones de dólares. La compañía estimó en 605 millones de dólares el impacto
adverso en su facturación relacionado con la pandemia del COVID-19, sin la que
sus ingresos habría sido un 3,2% menores a los del primer trimestre del año
pasado. AT&T tenía 180.000 millones de dólares de deuda entre distintas vías de financiación a
finales del año 2019, lo que la convertía en la compañía más endeudada del mundo. Desde
entonces, dicho apalancamiento se ha reducido a 150.000 millones de dólares a
través de la venta de activos y la refinanciación de dicha deuda https://bbc.in/2SdKJh2
Fuente: AT&T
En otro orden de cosas, el valor de la acción durante el mandato del actual presidente que se va, han caído alrededor del 25%. El índice S&P 500
casi se ha duplicado durante el mismo período de tiempo de dicho directivo, y los rivales de AT&T, como son
Verizon (VZ) y Comcast (CMCSA) han ganado más del 50% y 175% respectivamente. Por lo tanto su gestión no se puede decir que fuera brillante, más allá de que deja un "portaaviones" en dique seco con una vía de agua considerable por su apalancamiento, situación muy similar a la que dejó el anterior inquilino de la compañía Telefónica con una deuda neta de (50.213 M€).
Fuente: TELEFÓNICA
Para terminar el post,
decir que si bien Stankey ha tenido sus detractores, entre los que se puede citar
a el fondo Elliot, ya que cuando entro en el capital de la operadora criticó duramente su estrategia de medios
y acusó de la misma directamente al señor Stankey. Después de que
fuera nombrado director de operaciones en octubre, el fondo observó con
desaprobación que Stankey ahora también sería responsable de 145.000 millones de
dólares de ingresos como presidente y director ejecutivo de la misma, sin
embargo, el tono ha cambiado desde entonces. Elliott retrocedió después de
que Stephenson aceptara algunas de sus sugerencias, y el viernes pasado, el
fondo de cobertura anunció su apoyo al nombramiento de Stankey como director
ejecutivo. Pero, sin embargo las espadas permanecen en todo lo alto hasta el 1
de enero del año 2021, que será cuando se nombrará un presidente ajeno a la operadora
y cuando Elliot intentará hacer valer su representación. El fondo Elliot es un
viejo conocido en España por haber merodeado con el fin de entrar en el capital
de Telefónica, no lo hizo, pero dejo como secuela un plan estratégico con los mismos tintes que los que marca el camino
en AT&T http://bit.ly/2UqLt4k Afortunadamente
pasado dicho episodio, hoy el Gobierno español y la Comisión Europea https://bit.ly/3ezV3cV han puesto a buen
recaudo el interés general de los sectores estratégicos, con respecto a las
ocurrencias que emanan de dichos fondos y que desgraciadamente solo traen
beneficio a los de siempre…A los especuladores.
Ya lo dijo Francisco Umbral: “Lo que le concedemos a la
memoria quizá se lo quitamos a la especulación.”
muy bueno. enhorabuena
ResponderEliminar