El martes 16 de diciembre el gobierno de España anunciaba la compra de un 10% del capital de Telefónica a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), situándose como el primer accionista de la principal empresa estratégica de este país. Dicho anuncio venía precedido de la acción lanzada por el equipo directivo de la operadora el 4 de diciembre, un ERE para 5.124 empleados de la compañía. Si bien los dos hechos tienen un mismo escenario, Telefónica, ambos divergen sobre el interés de quien sé tiene que beneficiar de Telefónica como operador incumbente, que es fundamental los ciudadanos de este país. Bien es cierto, que el interés de los actores que están interviniendo en esta batalla son diametralmente opuestos, el gobierno por fin ha tomado la acción de defender a una compañía que se encontraba al albur del mejor postor ante la vulnerabilidad que presenta tras su privatización desde el año 1996 cuando se vendió el último 20% del capital. Esto sido puesto de manifiesto con la entrada de STC en su accionariado de Telefónica. Por otro lado, tenemos a un equipo directivo que lleva desde el 8 de abril del 2016 al frente del timón de la operadora con un resultado de gestión como nos muestra la cotización que es errático, llegó cotizando a 9,31 euros y antes de la entrada de la SEPI estaba por debajo de 4 euros tras siete años y medio al frente de la gestión. Su único objetivo es perpetuarse al frente de la operadora con una estrategia financiera, no industrial, que diverge radicalmente de lo que sucede en otros países de nuestro entorno como son Alemania y Francia, donde ambos Estados están en él capital de sus operadoras, en Orange con él 23% y en Deutsche Telekom con él 30%, velando porque la estrategia de ambas operadoras coincida con él desarrollo de la digitalización de ambas sociedades. Voy a intentar analizar ambos sucesos de forma separada para situar donde están ambos interesados en esta disputa, que de momento está bien encaminada por el gobierno de España.
Porcentaje de afectación de las distintas comunidades por el ERE de Telefónica
El gobierno de España ha destinado casi el 30% de los fondos europeos Next Generation EU (20.000 millones de euros) a la digitalización, según el 'Informe de la Década Digital 2023' (que sustituye y amplía la serie de informes publicados en años anteriores titulados Índice de Economía y Sociedades Digitales -DESI- e incluye las actuaciones que cada país ha realizado para alcanzar las metas y objetivos establecidos en la Década Digital), orientado a medir y evaluar, a través de un seguimiento individualizado, los avances y la evolución de cada uno de los Estados miembro de la Unión Europa en materia de digitalización http://tinyurl.com/yvt3n3ys La digitalización es una herramienta que vertebra el desarrollo económico de cualquier país, por lo que dicho tren tiene múltiples paradas durante del viaje que realiza para acompasar el desarrollo de un país con el bienestar de sus ciudadanos. Ante esta realidad el gobierno se encuentra con una operadora, Telefónica, que esta regida por criterios financieros única y exclusivamente. Los objetivos industriales han sido relegados, una buena muestra de dicho ejemplo la tenemos con la inversión que se realiza en I+D para hacer avanzar dicho desarrollo de la digitalización. El último informe presentado por la Unión Europea del año pasado sobre las 2.500 compañías que más invierten del mundo en innovación, Telefónica figuraba en el puesto 233, si nos fijamos dentro de las operadoras de telecomunicaciones era la cuarta a nivel mundial pero muy alejada de las que hoy marcan el paso en el mundo digital. El gap o diferencial con los compañías que hoy mandan en la digitalización como son los OTTs, Telefónica invirtió 33 veces menos que Alphabet (Google) primera en dicho ranking http://tinyurl.com/z278h665 España tiene todavía zonas donde el desarrollo de la digitalización no ha llegado, para ello lanzó el Programa UNICO Demanda Rural y 'Conéctate35.es' con el que se pone fin a la brecha de la conectividad en España. El nuevo programa UNICO Demanda Rural se encuadra en la agenda España Digital 2026, la hoja de ruta puesta en marcha por el Gobierno en 2020 para impulsar la transformación digital del país con los fondos europeos Next Generation y aprovechar las nuevas tecnologías y las oportunidades de la nueva economía digital. Además del programa UNICO Demanda Rural, se publicó en el Boletín Oficial del Estado la orden de bases para la convocatoria de las ayudas 5G Redes Activas del programa UNICO, que contarán con un presupuesto de más de 500 millones de euros para desplegar en municipios de menos de 10.000 habitantes el equipamiento necesario en los servicios 5G. Próximamente se lanzará la convocatoria del programa UNICO Banda Ancha 2023 para seguir desplegando la fibra y culminar el proceso de implantación en toda España, para el que ya se han movilizado más de 1.000 millones de euros de inversión con "resultados palpables", según ha avanzado la vicepresidenta, Nadia Calviño. España ha escalado dos puestos en el último índice de la Economía y la Sociedad Digitales (DESI) elaborado por la Comisión Europea, situándose en la séptima posición de los 27 Estados miembros de la UE y consolidándose como el país de gran tamaño más digitalizado de la UE. En este escenario Telefónica tiene que jugar un papel destacado, sin embargo, no lo está haciendo. Una muestra de ello, es la venta o enajenación que llevó a cabo la operadora vendiendo partes de sus redes de fibra óptica como sucedió en España, Brasil, Colombia, Chile o Alemania http://tinyurl.com/yc4erfck En Italia el gobierno de la ultraderechista Meloni blinda sus redes de fibra comprando un 20% de la participación de la compañía Netco que las agrupa, sin embargo, en España Telefónica vende parte de ellas con el fin de como dice su equipo directivo “cristalizar valor” http://tinyurl.com/2jx3zx25
La
entrada del gobierno en Telefónica es un hecho por lo que nos van diciendo los
miembros del gobierno, que va más allá de la circunstancia del 4,9% que hoy
tiene STC en su capital, su objetivo es según la vicepresidenta, Yolanda Díaz, “abre
un escenario radicalmente diferente” y “da absoluta seguridad” ante la presencia de cualquier oferente
no deseado con una compañía estratégica. Afirma la vicepresidenta, “debemos
tener una política industrial definida, tenemos que establecer bien cuáles son
nuestros sectores estratégicos, tenemos que tener un estado emprendedor para
poder hacer los grandes retos de transformación de país que tenemos. Sin lo
público y la colaboración con lo privado no seremos absolutamente capaces”. Por
su parte, el presidente del gobierno, Pedro Sánchez, enmarca dicha
entrada en el capital de la operadora en una “operación estratégica
relacionada con la defensa y la ciberseguridad”. Para Sánchez, “tiene
que ver con la transformación digital y con que ahora mismo las
telecomunicaciones están íntimamente vinculadas con la seguridad, con la
defensa, con la ciberseguridad y con el desarrollo de toda la economía digital,
en la que están inmersas las economías particularmente occidentales” http://tinyurl.com/4nzn7r8s La entrada en Telefónica busca una clara vocación industrial para el desarrollo
de la digitalización, con empuje tractor para el desarrollo económico de diversos
sectores económicos de España. Un buen ejemplo lo hemos visto con la compañía Indra,
desde la llegada de Marc Mutra al frente de la misma dando el relevo a la
estrategia financiera de Abril Martorell, la compañía he emprendido un plan de integración
para el desarrollo de múltiples proyectos europeos como es el futuro avión de
combate FCAS, lo cual ha propiciado que Indra no solo se desarrolle en multitud
de campos tecnológicos propiciando nuevas fuentes de ingresos, sino que la
cotización ha recogido de buen grado la misma, pasando de 7,15 € a 14 € (+48,3%).
Telefónica tiene que emprender el mismo camino, por delante más allá del reto
que tiene en nuestro país con el despliegue del 5G Stand Alone y las redes de
fibra FTTH en la España vacía. En Europa se están empezando a dar los primeros
pasos para el diseño y desarrollo del 6G, proyecto que según las primeras proyecciones
económicas de la asociación de operadores GSMA, en cinco años el tráfico se
habrá multiplicado por tres. Otros estudios auguran que el impacto en el PIB
europeo del 5G alcanzará en 2030 los 200.000 millones de dólares, una cifra
replicable con el 6G para 2040 http://tinyurl.com/3ym24krc
Telefónica tiene que estar en este proyecto como en otros que saldrán para
el desarrollo de la digitalización que pondrá en marcha la Comisión Europea, el
fin último es que Telefónica sea alinee con el gobierno, tanto de España como
de la Comisión Europea en las líneas estratégicas que permitan no perder el
tren con chinos y norteamericanos. Telefónica hoy tiene un mercado que es
una prolongación de oportunidades con Latinoamérica, objeto de deseo de China.
Sin embargo, el acierto del camino emprendido por el presidente de la
operadora, Cándido Velázquez, en el año 1989 con la compra de la división de
Chile, para posteriormente expandir la misma a Argentina, Puerto Rico, Venezuela
http://tinyurl.com/4f4azbxe ha
naufragado bajo la dirección actual de la compañía que ha entrado en un letargo.
Incluso se han planteado crear una spin-off con el fin de segregar dichos
activos para venderlos http://tinyurl.com/ys7574s6
La estrategia financiera que arrancó en el año 1996 con la llegada de Juan
Villalonga a la presidencia de Telefónica bajo el paraguas de José María Aznar,
ha tenido su continuidad con los presidentes que le han sucedido, César Alierta
y Álvarez-Pallete, relegando a la esquina la política industrial. El
resultado de dicha estrategia está claro lo vemos el valor de mercado por su cotización.
Parece que por fin el gobierno actual emprende el camino radicalmente opuesto para romper el maleficio de la estrategia financiera y se vuelve a una estrategia industrial que
permita recuperar lo que sucede en países de nuestro entorno como Francia y
Alemania, donde existe una política industrial que gira alrededor de compañías
alineadas con el desarrollo del país, para lo cual son tractoras de la economía
a través de la inversión en I+D. Esto hoy en España no existe con el modelo
de gestión que han implantado algunos presidentes.
Desde el anuncio del desembarco de la SEPI en el accionariado de Telefónica, hemos oído versiones y opiniones por la prensa de todo tipo de medios de comunicación, principalmente las interesadas que tienden a desinformar al ciudadano con argumentos que no se sostienen si nos fijamos que sucede en países de nuestro entorno con las compañías de telecomunicaciones http://tinyurl.com/mpr8jvah El origen de las mismas es claro, provienen de sectores conservadores que no tiene en su fin nada más que el deseo de mantener el poder que proporciona un modelo económico de casino que está instaurado actualmente, este ha llevado a Telefónica a una clara irrelevancia con sus pares europeas y mundiales por su capitalización. Hoy el presidente del gobierno ha manifestado en una reunión con el representante del PP, que el camino emprendido no tiene vuelta atrás y que se abre a estudiar un cambio en la regulación que permita a Telefónica salir de la asimetría con la que tiene que competir en el actual mercado español http://tinyurl.com/3p4899jv Si bien esta medida ayudará a mejorar el escenario competitivo de Telefónica, la política industrial de la que hoy carece puede ser más determinante ya que abrirá la compañía a nuevos productos y servicios si se apoya en la innovación. El 30 de noviembre escribí un post en el blog donde decía que la sociedad española estaba bajo el ruido mediático de quien hoy ejerce el control de la operadora http://tinyurl.com/36afd62e, pero que hasta que no desembarcara la SEPI en el accionariado de la operadora no sabríamos que sucedería. Pues bien, hoy arranca el camino opuesto de 180º ante la estrategia llevada hasta la fecha, el diseño de dicha andadura ya está realizado como sucedió con la compañía Indra, de momento el primer escollo que tendrá que afrontar el gobierno a través del Ministerio de Trabajo es el expediente de un ERE dentro de Telefónica de España.
El ERE propuesto para despedir a 3.411 empleados con el fin de ganar eficiencia económica (400 millones de €), tiene su fundamento en convertir el empleo precario el empleo actual, es una estrategia de corto recorrido ya que descapitaliza él conocimiento actual que tiene la compañía, que es una de las estrategias a las que más se recurre para ganar eficiencia con la dirección financiera que hoy gobierna la compañía. Bajo esta estrategia se han producido la salida de más de 60.000 empleados de la división de Telefónica de España. En el año 1990 la operadora tenía unos 78.000 empleados y hoy tiene unos 16.000. La cuestión no es broma desde el mismo momento de que con dicha acción se rompe con un principio de “voluntariedad” que existía dentro de la compañía, para implantar el modelo de “obligatoriedad” por edad, todo ello con la rúbrica y conformidad de alguna organización sindical (UGT). El 12 de abril del 2021 se publicaba que un ERE de Huawei en España fue llevado a la audiencia nacional y fue declarado nulo el despido de cinco profesionales de la multinacional por considerarlos discriminatorios por razón de edad http://tinyurl.com/mr3y3t4c Si a este hecho, añadimos que la compañía pago durante este año 1.720 millones de euros de dividendo y que tienen más de 100.000 empleados trabajando desde las subcontratas, la foto y justificación del ERE tiene cuando menos que ser estudiado con detenimiento, para ser valorado si cumple la legislación que lo ampara. El 4 de diciembre ante dicho ERE la vicepresidenta, Yolanda Díaz, afirmó a un medio de comunicación “que estudiará el ERE anunciado por Telefónica cuando lo tenga encima de la mesa y que se reunirá con las partes involucradas, según ha avanzó en una entrevista en La Sexta”. Por lo tanto el acuerdo al que lleguen las partes, empresa y sindicatos, tendrá que pasar el tamiz que se imponga desde el Ministerio de Trabajo a partir del 4 de enero, que es cuando se acaba el plazo para negociar dicho ERE. Hay que recordar, que dicho ERE va en la dirección contraria a la que ha marcado el gobierno de Pedro Sánchez, él cual quiere abordar con el modelo de política industrial, ya que la misma pasa por un desarrollo económico que reemplace los bienes y servicios importados por bienes y servicios producidos localmente, para lo cual el conocimiento (know how) de las personas en fundamental http://tinyurl.com/4n4jh8bp Si a lo dicho anteriormente, añadimos que la división de Telefónica de España es la más reducida de las grandes operadoras dentro de la Unión Europea, la cuestión tiene su enjundia.
Arranca pues el cambio dentro de Telefónica, que en los próximos días nos irá dejando movimientos a un modo de entender el desarrollo industrial que arranco en el año 1996. El mismo nos llevó a una situación de irrelevancia para el desarrollo económico que hoy necesita España y que necesariamente no pasa por el modelo de casino financiero implantado. Así pues, bienvenida sea la política industrial si con ella se consigue eliminar todas las distrofias que este liberalismo aberrante impuso y que tanto daño hicieron a la sociedad española… Como fue el caso de las privatizaciones de los sectores estratégicos.
Ya lo dijo Miguel de Cervantes: “Siempre los ricos que dan en liberales hallan quien canonice sus desafueros y califique por buenos sus malos gustos”.
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